La Inteligencia Artificial y su futuro en softwares no reemplazará a los humanos, ¿o sí?
¿Alguna vez te has detenido a pensar en la increíble influencia que la tecnología tiene en nuestras vidas? ¿Has notado cómo la inteligencia artificial ha llegado para hacernos la existencia más fácil? Pero al mismo tiempo, también nos ha hecho pensar, ¿hasta qué punto, realizar ciertas actividades, hará a la fuerza humana un recurso reemplazable?
Habiendo una infinidad de perspectivas sobre este tema, vamos a empezar por lo básico: la tecnología ya está en TODAS partes -bienvenidos al 2023-. Ya sea en los teléfonos inteligentes que llevamos en nuestros bolsillos hasta los avanzados electrodomésticos que nos ayudan con las tareas más básicas en nuestro hogar, la tecnología nos ayuda a resolver problemas y simplificar tareas. -No mientas, tu también ya te acostumbraste a decir “Alexa, apaga la luz” antes de dormir-.
La inteligencia artificial, o IA para los amigos, es uno de los avances más emocionantes en el mundo tecnológico. Es como tener un asistente personal súper inteligente que está ahí para ayudarnos 24/7 -siempre y cuando haya conexión a internet,- y claramente, no solo para tareas del ámbito personal.
Algunas de las aportaciones más importantes de la IA en las distintas industrias que podemos mencionar son:
1. Reducción de errores y aumento de la precisión en procesos de producción, ya que la IA ha favorecido la reducción de errores humanos y, por lo tanto, una mayor precisión. Un ejemplo de software con esta función es Vuforia, una plataforma de desarrollo de aplicaciones de Realidad Aumentada (AR) y Realidad Mixta (MR) multiplataforma para dispositivos móviles y monitores de realidad mixta montados en la cabeza (HMD) como Microsoft HoloLens.
2. Diagnóstico médico: la integración de IA en el sector salud, ha permitido un mayor nivel de precisión y especificidad en los diagnósticos médicos, favoreciendo una detección temprana y un tratamiento de enfermedades altamente efectivos. Un software con esta función es Your.MD, que brinda información de salud personalizada al usuario a través de un chatbot.
3. Conducción autónoma: La IA ha permitido la conducción autónoma de vehículos, lo que favorece un gran incremento en la seguridad y la eficiencia del transporte. Uno de los ejemplos más conocidos de aplicación con esta función, es Waymo.
4. Asistentes virtuales: Una de las aplicaciones de IA mainstream de la década, con la que los usuarios son apoyados con la realización de tareas básicas, así como con la gestión de información. ¿Necesitamos ejemplos? ¿o basta con preguntar si prefieres a Siri, a Alexa o a Google Assistant?
5. Evaluación de riesgos financieros: La evaluación de riesgos financieros de alta precisión, lo que ayuda a las instituciones financieras a tomar decisiones más informadas. Un ejemplo con esta función es Alacriti, un emulador de terminal acelerado por GPU gratuito y de código abierto, centrado en el rendimiento y la simplicidad.
Pero si estas son herramientas de gran utilidad, ¿por qué genera tanto revuelo la inclusión de IA en nuestro día a día?
Dejando de lado la regulación ética que aún se encuentra en etapas muy tempranas, algunos casos controversiales que han abierto amplios debates han sido:
- DALL-E, el modelo que usa IA para crear imágenes a partir de descripciones textuales, con un nivel de detalle que llegan a parecer reales sin serlo.
- AlphaGo, programa que aprendió el juego de mesa Go a un nivel sobrehumano y venció a los campeones mundiales.
- Procesamiento del lenguaje natural (NLP), que ha mejorado a un nivel hiperrealista la traducción de idiomas, generación de voz y chatbots.
- Sophia, el humanoide con IA que puede reconocer e interactuar con las emociones humanas de manera casi real.
Como reflexión, claramente hay tareas repetitivas y mecánicas que la IA en conjunto con la robótica son capaces de realizar más eficientemente y de manera más precisa que los humanos. Lo significa que, en algunos casos, la IA podría reemplazar la mano de obra humana en ciertos trabajos.
Sin embargo la IA no es una solución universal para la automatización de empleos en todos los ámbitos de la industria (como sugirió la fiebre por ChatGPT en la mente de los más ilusos hace unos meses).
La IA y los robots aún no son capaces de replicar completamente ciertas habilidades humanas, como la creatividad, el pensamiento crítico y la empatía, que son cruciales en muchos trabajos.
Por lo tanto, la implementación de la IA y la robótica en el lugar de trabajo debe ser bien considerada y estudiada para asegurar que se maximice su potencial, tal cual lo han hecho todas las herramientas predecesoras y aún vigentes cuyo objetivo ha sido simple y claro: automatizar procesos y tareas repetitivas sin la necesidad de intervención humana, buscando incrementar la eficiencia y la productividad, de forma medible en cierto periodo de tiempo, que han funcionado y hoy son parte de nuestro día a día, como:
- Las plataformas de comercio electrónico, en las que se pueden realizar compras al igual que en una tienda física, pero no reemplaza la experiencia kinestésica.
- Plataformas de gestión de proyectos que automatizan tareas complejas como la programación de tareas y seguimiento del progreso, pero no reemplazan a los managers o gestores.
- Plataformas de gestión de pautas publicitarias en medios masivos, que automatizan tareas que anteriormente, demandaban horas hombre con inexactitud e imprecisión, generando una optimización en los tiempos de la fuerza laboral y datos certeros, como MediaAdmin.
La IA ha iniciado la siguiente revolución tecnológica y eso es un hecho, por lo que sería recomendable conocer y analizar qué herramientas podríamos aprovechar para nuestro día a día, sin dar por hecho que todo lo resolveremos con IA.